Venezuela, el revés de la trama

Venezuela, el revés de la trama 24 de enero de 2019

Javier Félix Muñoz

Chihuahua, Chih.

“Todavía hay personas en el mundo que siguen creyendo que la crisis que padece actualmente Venezuela es por culpa de Nicolás Maduro y no del brutal bloqueo económico impuesto por Estados Unidos, por no acceder a entregar su petróleo y sus recursos naturales, pero así son los medios de comunicación, te hacen odiar al oprimido y amar al opresor”

Bernie Sanders – Senador de los Estados Unidos de América



El día 4 de Enero del 2019, 13 países de América Latina, denominado Grupo de Lima, que incluye entre otros a: Brasil, Argentina, Colombia, Chile y Perú, acordaron no reconocer el nuevo mandato del Presidente venezolano constitucionalmente electo Nicolás Maduro, y le instaron a: “1. no asumir la Presidencia, 2. Respetar las atribuciones de la Asamblea Nacional y 3. Transferir en forma provisional el poder ejecutivo hasta que se realicen nuevas elecciones presidenciales democráticas.”

México pertenece a este grupo de Lima, fue el único país que no aceptó ser títere del imperio norteamericano y las trasnacionales, no aceptó desconocer al gobierno democráticamente electo de Nicolás Maduro.

El Revés de la Trama, es el título de una novela escrita por el novelista inglés Graham Greene, en inglés: The Heart of the Matter, lo esencial del asunto.

Lo esencial de este asunto, parafraseando la novela de Graham Greene, es que las trasnacionales petroleras y los poderes fácticos a ellas asociadas, no ceden en su empeño de saquear los recursos naturales de nuestro continente.

En 1938 fueron expropiados los intereses de las compañías petroleras en México por el Gobierno del Gral. Cárdenas, 60 años después en 1998, la Revolución bolivariana encabezada por Hugo Chávez en Venezuela, recuperó de las trasnacionales la soberanía energética, lo mismo sucedió en la Bolivia de Evo Morales como Presidente Electo.

Andrés Manuel, como responsable de la política exterior, al no plegarse a los designios de Mr. Trump y las trasnacionales petroleras, rescató en el grupo de Lima, lo mejor de la política internacional mexicana, aplicó estrictamente lo establecido en nuestra constitución en el Art. 89 Fracción X, que autoriza al Presidente de la República a dirigir la política exterior, de acuerdo a los principios constitucionales de a) autodeterminación de los pueblos, b) no intervención, c) solución pacífica a controversias, d) no utilizar la amenaza o el uso de la fuerza en amenazas internacionales…

México y Uruguay han propuesto ser mediadores en el conflicto para que sea resuelto, por la vía pacífica, por los propios venezolanos. El gobierno del Presidente Maduro ha aceptado.

¿Cuál es el revés de la trama?, ¿Cuál es la otra cara de la moneda?, ¿Cuál es la historia que no cuentan?

Jimmy Carter afirma que: “el sistema electoral venezolano es el mejor del mundo”.

Nicolás Maduro fue democráticamente electo, el 20 de Mayo del 2018 con el 68% de los votos, la elección presidencial fue reconocida y avalada por los órganos y tribunales electorales de ese país, cuyas sentencias, al igual que en México, son constitucionalmente inapelables.

El Art. 233 de la Constitución venezolana establece los supuestos en que la Asamblea Nacional puede declarar la falta absoluta de un presidente y convocar a elecciones.

Ningún supuesto aplica: Maduro no ha abandonado el cargo, no ha renunciado, no está muerto, no ha sido destituido por sentencia del Tribunal Supremo de Justicia o incapacidad física o mental permanente, tampoco ha sido revocado su mandato por votación popular.

La Asamblea Nacional no tiene facultades para destituir al Presidente en Venezuela, el grupo de Lima de presidentes títeres que en vez de representar al pueblo representan al imperio norteamericano y a las trasnacionales petroleras, preparó el terreno para intentar destituir a un presidente nacionalista, defensor del petróleo venezolano, con las reservas petroleras más grandes del mundo: 300 mil millones de barriles de petróleo, de este golpe de estado.

Sí a la soberanía nacional, sí al rescate por Andrés Manuel de lo mejor de la tradición internacionalista de México, no a ser títeres de un imperio y sus trasnacionales que quieren apoderarse de los recursos petroleros tanto de México como de Venezuela.

“Entre los hombres y entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz.” Benito Juárez.

Javier Félix Muñoz

Analista y activista político