Sillas Mágicas en Parral

Sillas Mágicas en Parral 6 de octubre de 2025

Alfredo Espinosa

Chihuahua, Chih.

1.- Soy hijo del desierto y mi padre es el sol; pero tengo mis raíces en la luna.

La luz y sus instantes me deslumbran, me encandilan.

Amo el Sol Girasol que gira con pétalos de incandescencia.

O la luz de la Creación que se derrama como una bendición, y alumbra

O ese puñado de color que se arroja contra el vacío, y al azar colorea nuevas perplejidades, y asombra

Trabajo todos los días, y a veces vuelo.

He viajado por varios libros He leído algunos mundos

He subido al sótano Cavé en los infiernos

Llegué a las nubes

Y también hago sillas. Sillas con arte. Mágicas. EspinoSillas.

He pasado mucho tiempo de mi vida sentado. Estudio, escribo, escucho historias, o las pinto, o las vivo, sentado

Las sillas son seres de cuatro alas Cuando están solas hablan De cuando eran árboles

Y para escucharlas Hago sillas

Busco en el arte, belleza y libertad. Una fuerza que conmueva. Una pregunta o una perplejidad.

Por eso creo las Sillas Mágicas

2.- Las Sillas Mágicas son animales coloridos, esculturas públicas, arte libre, un tropiezo con lo insólito, ornato y funcionalidad, sobresalto en la cotidianidad, pausa para los cansados, una naturaleza fantástica, sillas de tacto y contacto, para ser vistas y abrazadas. Listas para el feis y el tik tokUna silla bajo la sombra fresca ofrece una versión de la felicidad

Sillas: estables, equilibradas, bellas cada una a su modo, serenas, dispuestas para tu descanso, la reflexión, los pesares, los recuerdos, los proyectos

Hacen lo que nadie: soportan tu peso

3.- A eso le tiro: quiero sacar mi casa de mi casa, los museos de los museos, y exhibirlos en la calle, para que esos objetos artísticos, los toquen y los utilicen, y para que transformen atmósferas, y pinten un rasgo luminoso en el rostro habitualmente sombrío de las ciudades.

El arte callejero es un buen monitor que determina el grado de civilidad que poseen los ciudadanos. Es mayor cuando, en vez de vandalizarlo, lo respetan, lo cuidan y lo disfrutan.Yo lucho porque la cultura esté entre los productos de la canasta básica

Yo creo el arte como un antídoto contra la violencia y, sobre todo, un vehículo de la felicidad

La atmósfera artística, donde la encuentres, expresa por sí misma, salud social y una comunidad que tiene ganas de florecer.

Una silla bajo la sombra fresca ofrece una versión de la felicidad

Sillas: estables, equilibradas, bellas cada una a su modo, serenas, dispuestas para tu descanso, la reflexión, los pesares, los recuerdos, los proyectos

Hacen lo que nadie: soportan tu peso

3.- A eso le tiro: quiero sacar mi casa de mi casa, los museos de los museos, y exhibirlos en la calle, para que esos objetos artísticos, los toquen y los utilicen, y para que transformen atmósferas, y pinten un rasgo luminoso en el rostro habitualmente sombrío de las ciudades.

El arte callejero es un buen monitor que determina el grado de civilidad que poseen los ciudadanos.

Es mayor cuando, en vez de vandalizarlo, lo respetan, lo cuidan y lo disfrutan.

Yo lucho porque la cultura esté entre los productos de la canasta básica

Yo creo el arte como un antídoto contra la violencia y, sobre todo, un vehículo de la felicidad

La atmósfera artística, donde la encuentres, expresa por sí misma, salud social y una comunidad que tiene ganas de florecer.

*Las Sillas Mágicas, esculturas libres se exponen en Parral.