Juárez tirasup
Repensando los cambios de la narrativa de la 4T

Repensando los cambios de la narrativa de la 4T 14 de enero de 2021

Guillermo Portugal

Chihuahua, Chih.

En memoria de Samir Flores Soberanes, activista asesinado morelense.

En base de que la Cuarta Transformación (4T) “no es anticapitalista pero sí antineoliberal” se define que el régimen de Andrés Manuel López Obrador, es un gobierno centralista-reformista y de un  liderazgo presidencial híbrido autocrático-democrático, en este sentido que las políticas públicas de la 4T son determinadas por dos fuerzas interdependientes que son los poderes fácticos, que es el sector de la sociedad “al margen de las instituciones políticas que ejercen sobre aquella una gran influencia, basada en su capacidad de presión”, como la banca, la Iglesia, los medios de comunicación, las grandes empresas nacionales y transnacionales; y por otra parte el Estado, que comprende a la población, el territorio, el gobierno y la soberanía nacional; en este contexto se inscriben las políticas reformistas de la 4T que intentan cambiar y dar respuesta al impacto lesivo del modelo neoliberal. 

Relativo a las conferencias mañaneras del año pasado, el presidente López Obrador destacó en alrededor de una veintena de veces la utilización de expresiones (con visos de arrogancia) como “no es por presumir, pero en el peor momento contamos con el mejor gobierno”, “como anillo al dedo” o el reiterado “yo tengo otros datos”; enunciados que causaron polémica en tres grupos: por una parte los intelectuales orgánicos fifís que están en oposición a la 4T destacando Héctor Aguilar Camín y Enrique Krauze; por otro lado, se tienen a los intelectuales orgánicos chairos que son los reformistas que retroalimentan a la 4T y que son incondicionales a “ya sabes quién”, siendo entre ellos los “soy totalmente palacio” como John M. Ackerman y Paco Ignacio Taibo; y en tercer lugar, los que el presidente ni los oye y ni los ve y que es la corriente de la izquierda social donde se distingue, entre otros, Efraín Arteaga Domínguez académico y activista de Mazapil Zacatecas, siendo esta corriente que propone al Estado, realizar los cambios estructurales que reorienten hacia una distribución equitativa del ingreso a fin de reducir la desigualdad social y con ello permitir a los más vulnerables acceder un trabajo digno que los beneficie de los medios de vida sustentables.

Abundando, sobre las mañaneras y los medios que cubren la nota presidencial, dichos medios dejaron la práctica del chayote porque fueron desplumados por la austeridad republicana con respecto de sus percepciones económicas que recibían en el periodo neoliberal, sin embargo, la mencionada situación no fue extensiva en el caso de la publicidad oficial, ver esto acerca de relación estructural de la inequidad del gasto oligopólico de alta concentración de las empresas de medios de comunicación del año 2019, donde arrojó un universo de 564 empresas y un monto total anual de 3,245.59 millones de pesos. 

Cuya desagregación del gasto privilegió en primer término a los tres medios más influyentes de ese momento: el Grupo Televisa, Estudios Azteca y La Jornada, los cuales en conjunto obtuvieron un 30% del gasto y que equivalen a un monto total de 958.79 millones de pesos; en segundo término figuraron 17 empresas de medios con el 36% del gasto y que corresponde a un monto de 1,168.338 millones de pesos; y el resto (que es una mayoría) conformada por 544 empresas que obtuvo un 34% del gasto y del cual equivale a un monto de 1,118.467 millones de pesos. (Fuente: publicidad oficial 2019, Ciudadanos en Red, 3 de julio de 2020). 

 


Asimismo, se sugiere se corrija el formato de las mañaneras para ser mesurados en el uso de adjetivos, al no denostar y en cambio utilizar una retórica que utilice enunciados asertivos y con ello evitar en lo posible dislates o exabruptos, en este tenor se eliminarían cuestionamientos estériles y en su lugar llevar a cabo análisis propositivos y constructivos. 

Por lo que las declaraciones ante la opinión publica del hombre de Macuspana y el primer círculo del gabinete debieran transcender el sesgo mediático y la verborrea burocrática y partidista. 

Cuestionamiento que obliga a reconocer que derivado a la profundización de la crisis económica y sanitaria del país será conveniente refuncionalizar la 4T y así priorizar e innovar, corregir los planes, programas y estrategias de incidencia en políticas públicas. 

Situación que implica para los megaproyectos, realizar una evaluación técnica, económica y social de cada uno de los mismos y que en base a sus resultados tomar las decisiones conducentes de continuar, posponer o cancelar los megaproyectos insignia como el Tren Maya, Aeropuerto Santa Lucia, El Corredor Interoceánico de Tehuantepec, Proyecto Integral de Morelos y Refinería Dos Bocas. 

También se sugiere como una propuesta alternativa a los citados megaproyectos y por la circunstancia en que se encuentran el sur del país, con una significativa población en la línea de pobreza extrema por ingresos, limitada preparación educativa, región con alto potencial de recursos naturales, conflictos agrarios, costumbres y creencias arraigadas, proceso que será implementado en el corto plazo, creando negocios agroecológicos en los territorios y donde sus habitantes participen sin intermediarios. 

Todo esto vinculado a lograr mayores beneficios para concretar la sustentabilidad y el desarrollo regional.

Por otra parte, derivado a las elecciones intermedias en puerta, es necesario aumentar la apertura democrática por lo que se deberá considerar el impacto y potencialidad de los usuarios de internet interesados en temas electorales “que usan una red social a través de cualquier dispositivo al menos una vez al mes”; mismos que alcanzaran  para mediados de este año los 84.4 millones del número de usuarios de estas redes sociales (Fuente: Statista Content & Desing, julio de 2020); por lo que se precisa como un cálculo conservador de que dichos usuarios representan un 25 por ciento del total de los mismos de las redes sociales, o sea el equivalente a 21.1 millones de personas. 

   Conclusión, la Cuarta Transformación debe construir una narrativa que permita una pluralidad política condicionada a no denostar con quien se discrepa y de tener un piso parejo en el debate, entonces cuando los integrantes del Estado contiendan con las diversas fuerzas de los sectores productivos-sociales se deberá poner en perspectiva los problemas de interés con un enfoque objetivo; asumiendo por tanto que la democracia y la libertad guíen la horizontalidad de los enfoques de los diagnósticos y del cómo para resolver los problemas de la agenda política nacional.

Analista y especialista en temas agropecuarios.

Correo electrónico: [email protected]