Reelección financiada
Sin Retorno

Reelección financiada 21 de agosto de 2017

Luis Javier Valero Flores

Juárez, Chih.

La reforma electoral aprobada el viernes anterior, si bien aborda muy pocas cosas, una de ellas es una verdadera aberración, que puede calificarse de inconstitucional, pero que desde el punto de vista de la salud pública es muestra palpable de la increíble degradación de la clase política, en este caso la chihuahuense.

Esa misma clase defendió tenazmente la posibilidad de que alcaldes, regidores y diputados pudieran reelegirse de manera consecutiva, en algunas entidades hasta por cuatro períodos, en el afán, decían, que para devolverle a la sociedad -como si esta lo hubiese tenido alguna vez- el derecho de calificar las buenas o malas gestiones de los gobernantes.

Aprobaron la reelección muy alegremente, pero dejaron a que cada legislatura estatal reglamentara la manera en que podían reelegirse.

El viernes, la dupla PAN-PRI aprobó que los diputados y regidores que decidieran reelegirse ya no tendrán que separarse de sus cargos, ni siquiera en la campaña electoral.

Es decir, podrán recibir el salario, íntegro, y gozar de todas las prestaciones que ahora tienen, entre ellas el pago del celular, el uso de las oficinas y la estructura de la presidencia municipal, en el caso de los regidores, pero en el de los diputados, además de lo anterior, seguirán recibiendo el conjunto de prestaciones que tienen normalmente, como el de apoyo para traslados, del pago de oficinas alternas, el de los asesores, pero ahora, también, en período electoral, de cuando ellos buscan la reelección.

Es decir, que, en lugar de como era hasta antes de la minirreforma aprobada el viernes anterior, los funcionarios que buscaran un puesto de elección popular deberían separarse de sus cargos pues se argumentaba que no podían emplearse recursos públicos en la promoción personal-electoral y que, además, al hacerlo, lo hacían con ventaja ante el resto de los candidatos, lo que le daba a la contienda electoral un rasgo de inequidad, motivo más que suficiente para anular procesos electorales.

Bueno, por lo menos tal decía la ley y por eso la cambiaron, para que los regidores y diputados puedan intentar reelegirse y que los salarios devengados en ese cargo les puedan servir para intentarlo.

Es decir, regidores y diputados en busca de la reelección recibirán un doble financiamiento gubernamental para sus campañas: El recibido por sus partidos para los gastos de campaña y el derivado de sus salarios y prestaciones como funcionarios públicos.

Que, además, para regidores y diputados es como si se les pagara una beca. En el caso de los regidores su obligación es asistir dos veces al mes a las sesiones del cabildo y si no asisten prácticamente no pasa nada.

Igual acontece con los diputados, tienen la obligación de asistir dos veces a la semana a las sesiones del Congreso y no se les sanciona si no acuden a las reuniones de las Comisiones en las que están anotados ¡No pasa nada!

Y para los regidores de Juárez esas ventajas se elevan si incluimos uno de los rubros mediante los cuales ellos pueden, cada uno, entregar 14 mil pesos mensuales a los ciudadanos solicitantes de ayuda, sin más requisito que mostrar un recibo con copia de la identificación del receptor de esos recursos.

¿Y si están en campaña y ellos deciden entregar los apoyos a sus, por ejemplo, brigadistas electorales? No, po’s no pasa nada, los diputados les extendieron un cheque en blanco para que los señores intenten reelegirse, al cabo que para esos están, ahí, los centavos públicos.

¡Viva la reelección! Digo yo…

Luis Javier Valero Flores

Director General de Aserto. Columnista de El Diario