Poder compartimentado
Sin Retorno

Poder compartimentado 10 de junio de 2021

Luis Javier Valero Flores

Chihuahua, Chih.

La mañana del lunes anterior el país amaneció bajo una nueva realidad política. 

Morena se convirtió en el partido dominante en México, lo logró no sin sufrir serios descalabros, el mayor, el de la Cd de México y en general en el Valle de México, pues abarca a varios municipios de la zona conurbada, pero en el balance general la elección intermedia a diputados federales sale bien librado el partido del presidente y en la de las gubernaturas se convertirá en el partido que más entidades vaya a gobernar, exactamente la mitad.

Pero los dos bloques político-partidarios conformados para ir a las elecciones sufrieron sendas derrotas en los objetivos planteados inicialmente: Ni Morena y sus aliados lograron la mayoría calificada en la Cámara de Diputados, ni la alianza Va por México logró tener mayoría absoluta (50% más 1) en ella.

Pero la alianza oficialista sí tendrá la mayoría necesaria para aprobar el presupuesto del gobierno federal, aprobar leyes reglamentarias y hacer alguna clase de nombramientos sin necesidad de efectuar negociaciones con la oposición. 

El presidente López Obrador podrá concretar sus acciones de gobierno sin mayores problemas, pero no tendrá a la mano la mayoría calificada para efectuar reformas constitucionales o nombramientos que requieran ese mínimo constitucional. 

Para hacerlo, deberá recurrir a la negociación con alguno de los partidos mayores de la oposición -PRI o PAN- y, por supuesto, atemperar el discurso descalificador hacia esas dos fuerzas políticas pues no podrá eludir el hecho de que el partido gubernamental solo constituye el 34%.

Más. Morena es hoy el partido gobernante en la mitad de las entidades del país, apenas a 8 años de su fundación, y ante los ojos del electorado dejó de ser el partido “del sur” para convertirse en la fuerza mayoritaria. Morena gobernará 16 entidades, mientras que el PRI perdió 8 gubernaturas, sin ganar ninguna de las 15 en disputa el domingo anterior.

Morena es, además, mayoritario en la Cámara de Senadores y posee mayoría en 18 legislaturas estatales.

No son pocas cosas lo alcanzado por el partido de López Obrador, sin embargo, ante el “fracaso” de no alcanzar la mayoría calificada en la Cámara de Diputados y del que sí fue un sonoro revés -el de la Cd. De México- en las primeras horas, la dirigencia morenista y el presidente se quedaron atónitos. 

No creían lo que había pasado y esos dos reveses, en los primeros momentos, los hicieron minusvaluar los éxitos obtenidos.

Y por alguna razón, a López Obrador le dolió sobremanera la derrota en Chihuahua ¿Será, acaso, porque un factor importante para que ello ocurriera fue que supo que sus decisiones acerca de entregar el agua de las presas a los EU, aspecto que despertó, sobremanera, el regionalismo de los chihuahuenses, y con razón, contribuyó determinantemente en el resultado final en nuestra entidad?

La derrota en el Valle de México es muy importante, no es como para desmadejar al partido gobernante, pero sí es como para preocuparlo rumbo a la elección presidencial del 2024 porque el hecho de perder la mayoría de los municipios de la capital del país, sí que constituirá un escollo muy importante para refrendar el triunfo presidencial y el de la jefatura de gobierno de la Cd de México.

Nada más para evaluar bien la clase de derrota que el electorado capitalino le propinó a Morena, tómese en cuenta que los municipios que serán gobernados por la oposición recaudan el 85% del impuesto predial de la ciudad.

No todo es negativo, Morena será, todavía, mayoría en la Asamblea de Representantes de la Cd de México pues ganó 19 de los distritos de  los 3, pero perdió la mitad de las diputaciones federales, además de ser derrotado en 17 de los 41 distritos federales del Estado de México.

Morena se amaneció como la primera fuerza del Pacífico pues ganó las gubernaturas de Baja California, Baja California Sur, Sonora, Sinaloa, Nayarit, Guerrero y Colima (En Michoacán Morena va adelante por 2.5%, con el 98.6% de las casillas capturadas).

Además, en Chiapas, Morena y aliados ganaron 13 de los 14 distritos y en Oaxaca ganan todos, los 10 distritos.

La sorpresa la constituyó la votación en Tamaulipas. Morena obtuvo 6 de 9 distritos federales y 16 de 22 los distritos locales, para convertirse en mayoría calificada en el Congreso del Estado.

Otra historia es la acontecida en Chihuahua, además de las razones de la votación del domingo anterior, en el país, y en nuestro terruño.

El domingo lo abordaremos.

Luis Javier Valero Flores

Director General de Aserto. Columnista de El Diario