Chihuahua, Chih.
La inflación marcó un papel determinante en el triunfo electoral de Donald Trump; 55% de los electores estadounidenses rechazan la gestión de Biden, 38% la aprueban y un 7% mantiene una opinión neutral según Morning Consult, al realizar una medición de la aprobación de líderes internacionales. (La elección de la inflación, Germán López, The Morning, NYT. Reproducido en Aserto,08,11,24).
La economía ha sido un factor fulminante para gestiones de todos los partidos, colores e ideologías a nivel mundial, el caso de Estados Unidos lo ha puesto nuevamente en evidencia. El Partido Demócrata en el poder ha sufrido una debacle electoral que lo ha obligado a plantearse una profunda transformación con el propósito de convertirse en una opción mucho más competitiva de cara a los próximos comicios intermedios de 2026.
Kamala Harris recibió menos votos que Biden en 2020, perdiendo once millones de votos en esta contienda para su partido. El apoyo entre la población hispana y afroamericana disminuyó notablemente, sacudiendo con ello las bases electorales que el partido tradicionalmente mantenía cautivas.
En medio de la resaca electoral, comenzaron las críticas y el reparto de culpas. Bernie Sanders, senador independiente por el estado de Vermont, mismo que fue rival de Biden en las primarias del partido en 2020, reflexionó que el partido se alejó de las clases obreras y se enfocó en conseguir votos de republicanos moderados, así como de ya no representar las causas del electorado estadounidense que solía ser respaldado por su oferta política.
La noche de pasado martes 5 de noviembre, Donald Trump hizo posible lo que se veía venir: un regreso de la furiosa ola que lo hizo llegar al poder en 2016 y se vió disminuida al menos temporalmente entre 2020 y 2022 para resurgir con fuerza este 2024.
¿Cómo gobernará Trump nuevamente? Las promesas de campaña pueden ofrecernos un panorama grisáceo para nuestro país: aranceles que van desde un 25 al 200% a todos los productos exportados desde nuestro país al mercado estadounidense; aumentar la seguridad transfronteriza fusionando agencias gubernamentales para crear una ‘súper’ policía migratoria, separando a miles de familias en ambos lados de la frontera; utilizar la fuerza militar estadounidense con el objetivo de neutralizar laboratorios de producción de drogas sintéticas, utilizando misiles que impacten en nuestro país, repercutiendo severamente en la relación bilateral.
La incertidumbre es la única certeza tras el regreso del republicano a la Casa Blanca, para México representa un reto complejo que necesitará unificar a la clase política y a todos los sectores de la sociedad.
En un país azotado severamente por la violencia del narcotráfico, la suma de las amenazas comerciales y políticas de nuestro vecino del norte elevan la presión sobre nuestro país. Son dos fuegos en los cuales son los ciudadanos quiénes se encuentran sin salida.