La lectura como acto político

La lectura como acto político 4 de febrero de 2025

Verónica Villegas Garza

Chihuahua, Chih.

Leer, claro que es un acto político, compartir los videos de lo que se lee, es un acto político, elegir nuestro siguiente  autor o autoría, es un acto político, los libros son circunstancialmente políticos, por eso se queman o se prohíben, los autores, claro que tienen posiciones políticas, por ejemplo, negarse a vender los derechos de una obra a alguna editorial israelí, que la ganadora del premio Nobel de literatura se negara para hablar en alguna conferencia de prensa es un acto político, autores que firman una petición, negándose a trabajar con alguna institución que no respetara los derechos de los palestinos.

Les pongo varios ejemplos: el propósito de año nuevo para leer durante todo el año obras de autoras o de autores latinoamericanos, es un acto político, elaborar una opinión acerca de los escándalos sexuales de determinado autor o autora es una posición política, autoras que escriben y hablan cada que pueden sobre la violencia contra la mujer es un acto político.

En 1984, la obra cumbre de George Orwell nos pinta de cuerpo entero cómo los gobiernos totalitarios llegan a reprimir revoluciones y como la sobre vigilancia de los gobiernos es un acto político; todo este mensaje político a través de la interacción de sus personajes, organizar clubs de lectura y elegir cuales obras o cuales temáticas son importantes y cuales no, eso también es un acto político

Elegir leer algún autor o autora que pertenece a las minorías, eso también es un acto político.

Según Freire, la lectura, en tanto nos ayuda a comprender el mundo en el que vivimos y por lo tanto a transformarlo, es un acto netamente político, al leer, aunque no sea nuestra primera intención, absorbemos información y por lo tanto crece nuestra capacidad de análisis y reflexión sobre la realidad que nos rodea y sobre su posible transformación.

La lectura nos permite cuestionar las estructuras de poder y los sistemas de dominación, y nos invita a imaginar alternativas y soluciones para los problemas que enfrentamos como sociedad y ver como otra sociedad solucionada su particular situación. En este sentido, la lectura es un acto subversivo que puede desafiar las narrativas dominantes y promover la justicia social.

Además, la lectura es un acto político porque nos permite conectar con otras personas y culturas, y nos ayuda a entender sus experiencias y perspectivas.

Esto es especialmente importante en un mundo cada vez más globalizado y diverso. A través de la lectura es una de las pocas oportunidades que tenemos de conectar con personas completamente ajenas a nuestro entorno, si no, ¿Qué podría yo tener en común con una persona en Rusia, o en cualquier país lejano que imaginen, si no es el gusto por la lectura y en especial por algún autor o novela?

Creemos que leer es un acto simple y placentero y en efecto lo es, no requiere un lugar especial, no requiere un equipo costoso como otras actividades, tampoco un horario, leemos en la casa, leemos en la cama, leemos al sol o debajo de las cobijas, leemos en la biblioteca, pero también en la sala de espera del médico y también en el camión o en el avión y, a pesar de su simpleza, leer e un acto político cuando nos permite vislumbrar las estructuras de poder, cuestionar las narrativas dominantes y promover la justicia social.

La política, en el sentido de actividad que busca organizar y regular la vida de una sociedad determinada, implica tomar decisiones que afectan a toda la comunidad y se enfoca en resolver conflictos y promover el llamado bien común y solo entonces, con la lectura, como acto político que nos permite comprender y transformar el mundo que nos rodea. ¿Qué opinas tú? ¿Cómo crees que la lectura puede influir en nuestra comprensión del mundo y en nuestra acción política?

Te leo en:

Threads @veronica_villegas_g

Verónica Villegas Garza

Analista y catedratica de la Uach