Chihuahua, Chih.
La economía mexicana, a decir de los datos que dio a conocer de manera oficial el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en 2023 creció en 3.2% medido por el Producto Interno Bruto, como el indicador macroeconómico más importante de nuestro país.
Desde el punto de vista estructural en 2023, el sector primario tuvo un crecimiento del 2.1%; el sector secundario o industrial, el 3.5%, resaltando en este sector el de la industria de la construcción que tuvo un crecimiento inusual del 15.6%.
Este crecimiento económico estuvo sustentado en una afluencia importante de la Inversión Extranjera Directa (IED), entendiendo que este tipo de inversión tiene como propósito crear un vínculo duradero con fines económicos y empresariales de largo plazo, por parte de capitales o inversionistas extranjeros y de cuyos beneficios directos es la generación de empleo.
En 2023, la IED sumo un monto de 36,058 millones de dólares, lo que significó el flujo de capitales extranjeros más alto en la historia de México, que además refleja la confianza de nuestro país hacia el entorno internacional.
Otro indicador que contribuyó a elevar el consumo y consecuentemente al crecimiento económico en 2023, lo fueron las Remesas Familiares que lograron cifra histórica 63,313 millones de dólares, el monto más alto en toda la historia desde que se tiene registro de dichos envíos, de dólares de paisanos que radican en los Estados Unidos y algunos otros en Canadá.
Agregando un indicador que, sin duda es muy importante por su contribución al PIB, son los ingresos que por turismo recibió la economía de este sector que, según información del INEGI, en los primeros tres trimestres de 2023, el país recibió 30 millones 860 mil turistas internacionales, un alza interanual de 12.1%, que dejaron ingresos por 22,908 millones de dólares, un incremento del 11.8%. Con base a este panorama, bien se puede aventurar a estimar que al cierre de 2023, los turistas pueden sumar un volumen cercano a los 40 millones de personas con un ingreso de, cuando menos, 25 mil millones de dólares.
En cuanto al comercio entre México y Estados Unidos, en 2022 se alcanzó otra cifra histórica por un valor de 779 mil 308 millones de dólares, un crecimiento de 17 por ciento respecto al monto registrado en 2021, de acuerdo con el Buró de Censos de Estados Unidos por lo que, al cierre de 2023, el volumen de las transacciones comerciales se coloca por arriba de los 800 mil millones de dólares, convirtiéndose, nuestro país, en el principal socio comercial de Estados Unidos, desplazando a China y a Japón.
A estos indicadores macroeconómicos que le dan solidez a la economía y a su dinamismo, generan una demanda excesiva en el consumo por lo que, por el lado de la oferta, los productores de bienes y servicios ven crecer su producción en las empresas y los micro, pequeños, medianos y grandes negocios.
Cuando se ligan estos indicadores con la dinámica de la economía nacional, observamos que hay factores internos que contribuyen directamente y se vinculan con los factores externos.
Por ejemplo, el sector turístico se ve impulsado por la infraestructura turística del Tren Maya en la región Sureste de nuestro país.
La inversión extranjera directa se vio impulsada por la confianza de la inversión privada y la inversión pública nacional. Estos hechos, sin duda, generan la confianza en nuestro país, que es el fiel reflejo de que hay estabilidad y confianza.
Al conjunto de estos factores, se suma otro indicador macroeconómico como lo constituye las Reservas Internacionales del Banco de México, que en realidad son los activos de nuestro Banco Central que, al cierre de 2023, sus reservas ascienden a 212,762 millones de dólares.
Hay que decir Banxico cuenta con un “cómodo” acervo propio de dólares para responder a choques externos, según expertos del FMI si quiere afectar su línea de crédito, las reservas del Banxico ascenderían a poco más de 250 mil millones de dólares.
Si se continúa agregando otros indicadores, como el control de la inflación, que en 2023 cerró con una tasa del 4.7% y una tasa de interés del 11%, entonces se puede encontrar la razón o justificación de la fortaleza del peso mexicano respecto al dólar, situación que ha hecho que nuestra moneda se mantenga estable y sin mucha fluctuación.
Resaltando que los que más se benefician de la estabilidad y del crecimiento económico de México, es la banca comercial que en 2023 obtuvo utilidades históricas por valor de los 248,023 millones de pesos, mucho muy superiores a las obtenidas en 2022.
Por lo anterior, la perspectiva de la economía mexicana para 2024 mantendría su tendencia en su crecimiento económico, aunque quizá para algunos organismos internacionales como el Fondo Monetario Internacional (FMI), con una estimación moderada, que prevé un crecimiento del 2.4%.
Incluso el Banco de México matizó su pronóstico de crecimiento para la economía mexicana en 2024, al considerar que podría alcanzar un crecimiento puntual de 2.8%, pero que está en el rango de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, que estima que el PIB puede crecer entre 2.5 a 3.5%.
Sin embargo, el Consejo Coordinador Empresarial (CCE) aseguró que el Producto Interno Bruto (PIB) de México podría alcanzar tasas de crecimiento de 4 por ciento y cuyo repunte sería posible si se concretan las expectativas en torno al nearshoring o relocalización de empresas e industrias hacia nuestro país.