Chihuahua, Chih
LA ASOCIACIÓN DE PERIODISTAS DE CIUDAD JUÁREZ, CONCEDIÓ A NUESTRO APRECIADO COMPAÑERO DE TAREA LUIS JAVIER VALERO FLORES LA COLUMNA DE PLATA EN SU EDICION 2021-2022, POR SU ARTÍCULO TITULADO: LA TARAHUMARA SI TIENE LEY, LA DEL CRIMEN ORGANIZADO.
TRABAJO PUBLICADO EL JUNIO PASADO EN ESTE ESPACIO, NOS CONGRATULAMOS POR SU MERECIDO RECONOCIMIENTO. ENHORABUENA
ANTE EL HORROR EL AMOR
Al momento de escribir estas líneas suenan tambores de guerra, ya no solo en la Ucrania poseída por la OTAN, Estados Unidos, la Unión Europea, e invadida para frenar la carnicería que llevaban a Cabo ahí contra los habitantes rusófilos de la región del Donbas en ucraniano y Donbass en ruso, además de ese frente se perfila una serie hasta ahora de rumores de la Xi Jinping que actualmente ejerce como secretario general del Comité Central del Partido Comunista de China, presidente de la Comisión Militar Central y, desde el 15 de marzo de 2013, como presidente de la República Popular China.
Se dice que está en crisis pero recordemos que los chinos usan este término CRISIS como problema y oportunidad a la vez, al parecer el mandatario chino ira por el rescate de Taiwan para cerrar una pinza con Rusia sobre Ucrania ya en acciones bélicas y dejar a Estados Unidos, con la menos una disyuntiva: ¿qué frente de guerra atender?
De momento por ser eso rumores, y guerra y dolor preferiré hablar del amor, y no de cualquier amor, sino el sagrado maro a la NATURALEZA.
Llama mi atención esta semana y rescato para compartir con ustedes amables lectores por su impacto el artículo de José Carlos Cueto* publicado en BBC Mundo titulado; Kwichon: el fenómeno por el que cientos de miles de personas en Corea del Sur se están mudando al campo,
Aquí su reflexión; “Durante décadas Seúl encarnó el espíritu de progreso y desarrollo sur coreano.
Esta megaurbe ocupa los primeros puestos de riqueza de entre todas las capitales mundiales y es epicentro de potentes industrias tecnológicas innovadoras que han conquistado el mundo.
Su magnetismo ha hecho que, solo el área metropolitana de Seúl, con casi 25 millones de habitantes, albergue a prácticamente la mitad de los sur coreanos.
Sin embargo, hay un creciente número de sur coreanos que se entregan a una nueva aventura: el kwichon.
"Kwichon significa literalmente 'regreso a lo rural'", explica Su Min Hwang, editora del servicio coreano de la BBC.
En los últimos años, el gobierno sur coreano observó con preocupación el despoblamiento de zonas rurales en detrimento de la capital y su área metropolitana. Varias estrategias se han lanzado para motivar a que la gente vuelva al campo.
Pero parece que es ahora que el kwichon vive su gran momento, con un récord de jóvenes sur coreanos entregándose a la vida rural.
La pandemia como impulsora
En 2021, la periodista Julie Yoonnyung Lee, del servicio coreano de la BBC, visitó el pequeño pueblo de Suncheon, en la provincia de Jeolla del Sur.
La provincia de Jeolla del Sur se encuentra en el suroeste de Corea del Sur.
Allí conoció a Yun Sihu, de 11 años, y a su madre Oh Sujung. Frente de la puerta de casa tenían una gran parcela de verduras con papas, maíz, berenjenas, pimientos y lechuga.
Lee cuenta que antes sus vidas no podían ser más distintas.
Sihu y su familia vivían en el noveno piso de un edificio de 19 plantas enclavado en una zona de tráfico denso. Incluso antes de que llegaran los confinamientos por la pandemia de coronavirus, Sihu y su hermano se las ingeniaban para jugar béisbol dentro del apartamento debido a la falta de espacio al aire libre.
Desde que se mudaron a Suncheon, su vista de rascacielos ha sido reemplazada por montañas, el ruido del tráfico por el cacareo de gallinas y el apartamento compacto de su familia por una casa tradicional de madera y techo curvado.
"Ahora pongo un pie fuera y todo es zona de juegos. Riego los pimientos, las berenjenas y las lechugas cada día", dijo Sihu.
Con más de la mitad de la población del país viviendo en el gran Seúl, muchos temieron que el covid se expandiera rápido a través de los densamente ocupados bloques de apartamentos de la ciudad.
Cuando llegó el virus, las escuelas cerraron primero. Para Sihu, el aislamiento fue demasiado. Su salud mental se debilitó al quedar atrapado con el aprendizaje en línea y sin poder ver a sus amigos.
Para su madre era devastador verle así. Entonces aprovechó la oportunidad de emprender una idea con la que había fantaseado por años: dejar la ciudad en busca de una nueva vida en el campo.
Otros cientos de miles de sur coreanos están haciendo lo mismo.
Para Sihu, la vida en el campo "no puede ser más perfecta".
Números récord
Regresar al campo y la agricultura es una tendencia que coge fuerza en los últimos años tras el golpe de la pandemia y por la necesidad de buscar estilos de vida alternativos.
Según una encuesta de 2021 de la Oficina Nacional de Estadísticas y el Ministerio de Agricultura, Alimentos y Asuntos Rurales, un total de 515.434 personas abandonaron Seúl ese año y se mudaron a pueblos rurales o pesqueros, un 4,2% más que el año anterior.
En particular, 235.904 personas de menos de 30 años retornaron a zonas rurales, un 45,8% del total y cifra récord desde que existen registros.
Durante décadas Seúl encarnó el gran crecimiento económico sur coreano, pero muchos jóvenes de hoy en día no son muy optimistas con sus perspectivas futuras.
"Recientemente, muchos jóvenes en Seúl terminan la carrera y, descontentos con su trabajo y perspectivas, deciden mudarse al campo a probar suerte. Y parece que a muchos les está gustando", le explica a BBC Mundo Ramón Pacheco Pardo, profesor de relaciones internacionales y especialista en asuntos coreanos y el este asiático en el King's College de Londres.
El descontento con el trabajo se une a otros motivos de queja en otras grandes ciudades del mundo, como los altos precios de vivienda, el estrés urbano y mucha competitividad.
Corea del Sur tiene una de las tasas de suicidio más altas del mundo y esta es la mayor causa de mortalidad en adolescentes y jóvenes, según estadísticas del gobierno. Psicólogos han atribuido estos niveles de depresión y suicidio a la intensa presión impuesta en los jóvenes para que cosechen éxitos académicos.
Éxitos que, por otra parte, un número creciente de jóvenes ve como inalcanzables debido a cómo el trabajo excesivo y el ritmo de la ciudad les consume sin darles las recompensas que esperan…”
COROLARIO
Para sintetizar por falta de espacio este articulo referiré que en Corea "Las zonas rurales se estaban quedando sin población porque precisamente los jóvenes y sobre todo las mujeres se mudaban a la ciudad en búsqueda de oportunidades… el país además, tiene una de las tasas más bajas de nacimientos del mundo, una estadística que golpea duro al espacio rural.
La despoblación del campo se fue agravando hasta el punto de atentar contra la seguridad alimentaria. Muchos agricultores, la mayoría gente mayor, comenzaron a jubilarse o morir sin jóvenes que pudieran sustituirles”.
…Antes de la pandemia, por ejemplo, muchas escuelas rurales estaban a punto de cerrar.
…Para ayudar a las escuelas rurales, las autoridades incluso ofrecieron subsidios a las familias dispuestas a abandonar Seúl.
Aquel año, la escuela de Sihu tuvo siete nuevos estudiantes y Youngmi, la profesora, asegura que toda la comunidad se ha beneficiado de los nuevos habitantes.
Queda por ver si estas generaciones jóvenes de migrantes rurales eligen mantenerse en la naturaleza o si se verán atraídos de vuelta al bullicio de la ciudad”
Preocupa como psicólogo el que se libere la posibilidad de realización de los niños como Sihu y jóvenes en espacios menos restringidos que los departamentales en rascacielos, que se abata la tasa de suicidio y se incremente y fortalezca la procreación, así Corea puede ser una vanguardia de AMOR ANTE EL HORROR, DEL BINOMIO PANDEMIA Y GUERRA, QUE AUN A TODOS NOS PREOCUPA.