Chihuahua, Chih.
A pocas semanas de las elecciones más grandes de la historia de México, el ambiente político electoral es cada vez más tenso, en buena parte porque el supuesto arbitro independiente del INE, más que árbitro en una contienda electoral, es parte central del conflicto.
El INE y el TRIFE más que árbitros, son cómplices de uno de los bloques electorales, puesto que están administrando selectivamente la aplicación de la ley electoral.
Ejemplo: las candidaturas de Morena a gobernadores en los estados de Guerrero y Michoacán, fueron canceladas, supuestamente por no presentar en tiempo y forma, ante la autoridad electoral, gastos de precampaña en ambos casos por cantidades menores a 20 mil pesos.
¿Es una falta? Si lo es, la sanción es desproporcionada, pues cancela a 2 candidatos, un derecho constitucional de ser electos, por una cantidad ínfima que en ninguna forma se puede considerar que altera el resultado de una elección, ni de un municipio pequeño, menos de Estados grandes como Michoacán y Guerrero.
El hecho de las cancelaciones de candidaturas a gobernador por no reportar al INE en tiempo y forma los gastos de pre campaña, pasaría desapercibido si fuera lo normal en el INE-TRIFE, cancelar candidaturas –de cualquier partido– por el motivo de no presentar en tiempo y forma los gastos de pre campaña o presentarlos “maquillados”, como es muy frecuente, con lo cual se cumple en la forma pero se viola la norma en el fondo.
Sobran los ejemplos de elecciones municipales, estatales y federales en que el PRI y el PAN han rebasado por mucho los límites permitidos, de inversión en pre campañas y campañas y en el 99% de los casos, el INE y el TRIFE han permanecido ciegos, sordos y mudos.
En México, es normal que se superen los topes de campaña y pre campaña a Gobernador o a la Presidencia de la República, no por 20 mil pesos sino por cientos de millones de pesos, y el INE y el TRIFE, en la gran mayoría de los casos no dicen nada.
¿Por qué ahora sí y antes no?
Algo está podrido en el INE y en el TRIFE y bien podrido, diría W. Shakespeare.
El Presidente de la República Andrés Manuel López Obrador afortunadamente sin dejar de hacer críticas al INE o al TRIFE, por actuar como cómplices en lugar de árbitros independientes, invitó a la ciudadanía en general y en particular a la de los Estados de Guerrero y Michoacán a acatar las resoluciones en forma pacífica.
Esto lo hizo público en varias ocasiones en sus conferencias mañaneras.
El 29 de Abril, anunció ante los reporteros de la fuente presidencial, que en uso de sus facultades constitucionales enviará al Congreso, una iniciativa para reformar leyes relativas a los órganos “autónomos” como es el caso del INE y el TRIFE, para democratizarlos y que respondan al interés general de la ciudadanía, y dejen de estar subordinados a unos cuantos, pocos pero muy poderosos intereses.
Los partidos del PRI y el PAN por más de 80 años, supuestos adversarios, hoy unificados en bloque, tratan de recuperar la mayoría en la cámara de diputados, para con ello poner un muro a todo cambio que Andrés Manuel y la 4T pretendan.
Los que apoyamos la 4T y a Andrés Manuel como en mi caso, más allá de las diferencias naturales en toda democracia, tenemos el deber histórico de salir a votar masivamente, para refrendar la mayoría en la Cámara de Diputados y hacer posibles los cambios legislativos que le urgen a México.