Chihuahua, Chih.

Después de los hechos delictivos del pasado jueves en el que presumiblemente fallecieron entre 8 a 14 personas tras los enfrentamientos por parte de fuerzas de seguridad y narcotraficantes al servicio del Cartel de Sinaloa en Culiacán se llegó a un nuevo plan operacional dispuesto a combatir al narco golpeando sus fuentes de financiamiento y de control armamentista.

El gobierno de México y el gobierno de los  Estados Unidos con el presidente Donald Trump a la cabeza manifestó a través de su hombre fuerte en México: el embajador Cristopher Landau su "preocupación" tras los hechos del pasado Jueves 17 de Octubre.

Después de una reunión entre el embajador y el gobierno de la república se llegó a la conclusión y posterior acuerdo de un nuevo programa intensivo entre ambos gobiernos que intensifique el control de armas a través de puertos aduanales.                                                                

El nombre del nuevo operativo anti armamentista corresponde al de "Frozen" que en inglés a su traducción correspondiente en español equivaldría a “congelado”.

El propósito de este operativo es "congelar" la entrada de armas de alto poder a manos del crimen organizado entre ambas naciones.

Por el momento los detalles del operativo y de su plan operacional no están detallados por completo pero su función es vigilar los cruces fronterizos y aumentar la vigilancia como a su vez la cooperación internacional en un intento por frenar al narcotráfico.                 

El último gran operativo contra el armamento irregular al narcotráfico ocurrió en 2009 durante la administración Obama causando un desastroso escándalo por el fracaso operacional.                                                                                                                               

El plan estadounidense a través de la oficina de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego consistía en enviar miles de armas de alto poder y calibre para que llegaran a manos de narcotraficantes y criminales con el único propósito de rastrear dichas armas. 

Lamentablemente muchas de esas armas continúan paseándose en manos de estos criminales y causando múltiples bajas a la sociedad mexicana.

Durante la ocupación ilegal de Culiacán, la capital del estado de Sinaloa por parte de sicarios del Cártel de Sinaloa se apreció un vídeo en el que un residente de la ciudad grabó a través de su ventana a un vehículo blindado de color blanco y a través de la caja de este se encontraban dos hombres altamente armados, uno de ellos posando con un fusil a la derecha y el principal tenía un arma Browning M2 de uso exclusivo del ejército de los Estados Unidos con capacidad de 550 proyectiles por minuto y de fabricación estadounidense inventado en 1933.

Una regulación de las armas no acabaría con el problema de raíz y quizás agrave aún más la situación. pero es necesario replantear una política armamentista para evitar que más tragedias sigan cimbrando tanto en nuestro territorio nacional como a nuestros vecinos estadounidenses, víctimas de una cultura violenta a causa de su locura por las armas.

Esperemos que Frozen cumpla su propósito y los errores de la operación  "Rápido y Furioso" de 2009 no se repitan nunca a causa del despiste de las autoridades correspondientes por rastrear las armas de alto poder.