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Fórmula para nombrar al sustituto(a) en la Secretaría de Cultura en Chihuahua

Fórmula para nombrar al sustituto(a) en la Secretaría de Cultura en Chihuahua 3 de junio de 2017

Leonardo Meza Jara

1.- Un sustituto no es alguien que estaba en la banca esperando su lugar, aunque tal vez esto sea posible. Un sustituto indica que todos somos prescindibles, que todos entran a un cargo público con su renuncia (voluntaria o exigida) firmada de antemano. Un sustituto puede ser el signo de algo mejor, pero también de algo peor. El sustituto es una moneda en el aire que al caer sobre el piso deja escuchar el sonido del metal, el ruido de un clic bajo la forma de la política y el presupuesto a ejercer.



2.- La alquimia para dar lugar al nombramiento del nuevo secretario de cultura es un acto a todas luces político, por lo que debe resguardarse lo político antes que lo cultural. Lo que alimenta a las bocas y deseos de los políticos que buscan mantenerse en el poder y extenderlo, es la política, no la cultura. La producción de la cultura es un acto decorativo, una figura estética de lo político, es como colocar un jarrón en una mesa o flores en las tumbas de los vivos.



3.- Hay que investir de discursos y promesas a la política cultural, hay que dar lugar a protocolos que ponderen la belleza de lo político a través de la cultura. Por ejemplo, ya que todos los políticos suelen ser unos ignorantes de la cultura, cuando un gobernador si lee y se roza con la élite cultural, debe aprovechar su sapiencia y sus contactos, y convertirse en presentador de libros o en crítico literario. Que se vea que el gobernador sabe, que su voluntad sea una voluntad de saber colocada al lado de una voluntad de poder (ambas se comparten o se reparten). Ahí es donde emerge la figura del intelectual que termina pudriéndose ante las concesiones del poder, ahí es donde nace la figura del político que aspira a una intelectualidad para usufructo del poder…



4.- Cuando las instituciones comienzan a morirse o decaer hay que cambiarles de nombre o de encargado. Si eso termina por servir para nada, al menos se convierte en distracción.



5.- El nombramiento del nuevo(a) secretario(a) de cultura es una alquimia político-cultural cuya fórmula puede considerar varios ingredientes:

- Corporativismo cultural.

- Cuota de género.

- Cuota partidista.

- Cuota de alianza.

- Concesiones con paréntesis ideológicos.

- Prebendas personales, de grupo o familiares.

- Dádivas con lealtades blindadas.

- Ocurrencias o caprichos del gobernante en turno.

- Etc., etc.



6.- Los ingredientes anteriores – y otros más- pueden mezclarse de manera diversificada. Y aunque las posibilidades no son infinitas, pueden ser tan variadas que cada nombramiento puede tener algo de novedoso y atractivo. Por ejemplo, puede seguirse la siguiente anotación a manera de receta, ya que los procedimientos de la política suelen convertirse en recetas:

En caso de tener deudas con los militantes de su partido, y en caso de ameritar que el puesto a sustituir requiera ser otorgado a una mujer, puede considerar a una mujer que sea integrante de la militancia de su partido, que tenga dos o tres conexiones claves con la comunidad cultural, aunque no sea artista. Así mata a dos o tres pájaros de un tiro, aunque las escopetas pueden disparar para atrás. Que no se le olvide, que de cualquier manera los integrantes de la comunidad cultural van a protestar por cualquier nombramiento. Los artistas son unos insatisfechos infinitos y para darles gusto está medio cabrón. Si se avienta el tiro de nombrar a un militante de su partido en ese puesto, cuando menos que sea peso mediano, no vaya a nombrar a un peso mosca porque se lo aplastan a periodicazos…

Otra posibilidad de preparación del nombramiento puede ser la siguiente:

300 gramos de corporativismo cultural, medio kilo de cuota de género, una pizca de concesiones ideológicas y un saco completo de dádivas con lealtades blindadas. Que se note que no sea una ocurrencia o capricho del gobernante en turno, porque después del nombramiento de Lucha Castro, otro “trompo a la uña” como ese, le puede perforar el dedo con el que señala los nombramientos…



7.- Véase como sea vea, el nombramiento se ve azul, azul, azul, con nubarrones de por medio y sequía presupuestal. Se pronostican cuatro años y algunos meses de lo mismo con posibilidades de mayor insuficiencia en todos los rubros…

Leonardo Meza Jara

Maestro, escritor y analista político.