Crisis de las buenas en el PRI
Sin Retorno

Crisis de las buenas en el PRI 29 de enero de 2018

Luis Javier Valero Flores

Chihuahua, Chih.

Si alguien tenía dudas acerca de la crisis por la que atraviesa el priismo chihuahuense, ahí están las postulaciones, o cuasi designaciones del fin de semana a los puestos de elección federales; las renuncias y la inscripción de varios aspirantes en algunos de los distritos.

La inscripción, ahí sí única, del ex gobernador Reyes Baeza a la primera fórmula de candidatos del PRI a la senaduría, ocurrió no sin apretones de último momento, tantos, que todavía dos días antes corrió el rumor que finalmente no accedería a esa posición, largamente añorada por la gerontocracia de la CTM, para regalársela a la heredera del dirigente estatal, Doroteo Zapata, que pretendía, de este modo, aprovechar la cuasi ruptura del ex Secretario de Gobernación, Miguel Osorio Chong, con el candidato a la presidencia de la república, José Antonio Meade, debido a la conocida cercanía del ex Director del Issste con Osorio.

Pero tal candidatura no fue aceptada -eso entendemos- por el otro ex gobernador que sería candidato en la próxima elección, el actual senador, Patricio Martínez, quien fue postulado sorpresivamente a la alcaldía de la capital del estado. Renunció, luego de argumentar que no quería dar motivos a más desencuentros al interior de su partido.

No son coincidencias, Patricio salió del ostracismo político, luego de ser gobernador, -había dicho que se fue a la mecedora- una semana antes de las elecciones del 2010, en el mitin de cierre de campaña de César Duarte, sólo para enderezar las baterías en contra del gobernador Reyes Baeza y acusarlo de ser el responsable de la inseguridad prevaleciente.

Electo Duarte, Patricio apareció en casi todos los actos públicos del nuevo gobernador durante, por lo menos, los primeros cuatro años, lapso en el que fue postulado candidato a senador. Ganadoras las fórmulas del PRI en esa elección, que llevó a Lilia Merodio y a él al senado, deberá recordarse que a pesar de obtener la mayoría de votos en el estado, en el municipio de Chihuahua perdió frente a la fórmula encabezada por Javier Corral.

Jamás defendió al ex gobernador Reyes Baeza de las gravísimas acusaciones que Duarte le lanzó al hoy precandidato. No podían aparecer juntos en el mismo proceso electoral y renunció.

Su lugar fue tomado por el actual diputado federal, Alejandro Domínguez, quien era impulsado por el grupo de Marco Adán Quezada y de Reyes Baeza, y otros grupos menores al interior del PRI capitalino.

Domínguez no dejó dudas, su primera declaración fue contundente: “No voy a dejar tirado al partido”.

Así, el grupo priista más importante en el estado, el jefaturado por los Baeza -los ex gobernadores José Reyes y Fernando- asumió la conducción estatal pues nadie le disputará al primero el liderazgo y su indudable cercanía al presidente Peña Nieto y esa es regla de oro para los priistas.

Pero no todo es coser y cantar. La senadora Merodio, aguda crítica de la actual dirigencia nacional priista, pero quien ha buscado acercamientos con el baecismo, se inscribió al distrito 03, de Juárez, y ayer, por la mañana, se había inscrito, también, la ex diputada local, Mayra Chávez, cercana colaboradora de Enrique Serrano. Hoy, también por la mañana, se ha informado que declinará en favor de la senadora Merodio.

Sin la euforia desbordante de otros años, en el registro de Reyes Baeza se evidenció la profunda crisis del priismo de Chihuahua. No estaban en el presidium los senadores Patricio Martínez, Lilia Merodio (ésta, inexplicablemente) y Graciela Ortiz, tampoco el ex candidato a gobernador, Enrique Serrano, ni el ex alcalde juarense, Héctor Murguía, ni el capitalino, Marco Adán Quezada -aunque este es de “casa”-.

El caso de la senadora Ortiz es más relevante. Ocupó la Secretaría General de Gobierno los dos primeros años del gobierno de Duarte, además de ser secretaria de Educación y de Fomento Social en el de Patricio Martínez ¿Serán éstas las razones para no aparecer al lado de Reyes Baeza en el acto del registro?

Deberán recordar, los priistas, que el panismo de Chihuahua -según la apreciación personal de quien habla y escribe- está “reciclado” gracias a la caravana gubernamental que realiza el mandatario chihuahuense, Javier Corral.

En tanto, la otra fuerza contendiente en el país, Morena, pareciera que desperdiciará la oportunidad, se ha dedicado a “reciclar” candidatos.

No sólo Cruz Pérez Cuéllar lo será al senado, también el ex dirigente nacional panista, Manuel Espino, aspira a serlo en Sonora.

[email protected]; Blog: luisjaviervalero.blogspot.com; Twitter: /LJValeroF

Luis Javier Valero Flores

Director General de Aserto. Columnista de El Diario