COVID 19,  etiología y destino

COVID 19,  etiología y destino 4 de abril de 2020

Gerardo Arturo Limón Domínguez

Chihuahua, Chih.

“Cuando duela, simplemente observa… la vida trata de enseñarte algo”

Anónimo

 

 REALIDAD QUE DUELE

Se habla tanto en estos días del dolor que nos produce este enemigo -invisible pero altamente poderoso en términos de destrucción- cuyo origen es aún desconocido etiológicamente y defino aquí lo que tal cosa es según el diccionario; “La etiología es la ciencia centrada en el estudio de la causalidad de la enfermedad. En medicina se refiere al origen de la enfermedad. La palabra se usa en filosofía, biología, derecho penal, física, y psicología para referirse a las causas de los fenómenos” , nos llevará mucho tiempo saber el origen de esta pandemia que hoy nos flagela,  pero llegado el momento se conocer todo y eso lo traerá como todo lo trae, el tiempo.

Así que no pongamos en el sospechosismo de la conspiración  el origen de este mal que se dieron durante la Peste Negra del Siglo XIV provocada por la bacteria Yersinia, ni en los atavismos de la fe equivocada que habla de “castigos divinos,” nada de eso, veamos la realidad dura y cruel que nos enfrenta a los virus como el de la llamada Gripe Española.

Fue una pandemia de inusitada gravedad, causada por un brote del virus Influenza A del subtipo H1N1 que flageló a la humanidad entre 1918 y 1920 costando un estimado de 40 millones de vidas, así que entendamos que bacterias y virus que existen en la tierra, si en esa vieja casa que habitamos como especie, después de que ellos ya existieran antes, por más de 280 millones de años, es decir que evolutivamente son habitantes más antiguos que nosotros, en el planeta.

Así que dicho sintéticamente, ya nos hemos enfrentado con ellos antes y aquí seguimos, hay esperanza pues, pero hace falta mucha inteligencia también y de eso quiero hablar hoy.

Para hacerlo compartiré dos experiencias  de trabajos que me han enviado estos días dos alumnas de cuarto semestre de la licenciatura en Pedagogía, me parecen pertinentes compartirlas para que tengamos referencia de cómo estamos viviendo en Chihuahua estos días y apoyarnos en entender cómo habremos de actuar en estos tiempos,  agradezco a ambas me hayan permitido compartirlos con ustedes

COVID-19

“El coronavirus hoy en día es un tema central en todo el mundo, una pandemia que sin duda ha logrado sembrar el miedo en los seres humanos, además de haber cobrado la vida de muchísimas personas.

Conforme ha avanzado este virus han surgido un sinfín de hipótesis del cómo se originó y que tan real es este suceso, sin embargo, lo que sí es real es que día a día despertamos con ese sentimiento de temor al encender nuestros televisores y escuchar que cada vez las muertes son mayores que el día anterior en diferentes partes del mundo.

Obviamente este es un tema alarmante, en lo personal me preocupa que la salud y bienestar de mi familia, familiares y amigos se vea afectada por esta situación.

Sin embargo y como todo, considero que cualquier acontecimiento que pasa en esta vida es con un propósito y de cualquier experiencia podemos rescatar aspectos positivos, aunque en estos momentos nos resulte muy difícil creerlo.

Como sociedad posmoderna estamos acostumbrados a un ritmo de vida demasiado acelerado en el cual nuestro tiempo está basado y enfocado en el trabajo, escuela, ocupaciones y necesidades personales, etc.  Un mundo en donde la humanidad se ha convertido en todo menos en humana, una sociedad egoísta que se ha olvidado del respeto y amor al otro, una sociedad en la que la familia ha pasado a un segundo plano. Por tal motivo considero que si existen razones por las cuales deberíamos agradecer al COVID-19, ya que nos ha obligado, por así decirlo, a volver a convivir con los nuestros, con nuestra familia, personas con las cuales quizá habían días en los que solo nos veíamos unos momentos o en ocasiones ni eso.

En cierta forma, creo que este virus vino a abrirnos los ojos y a recordarnos el valor de algo tan simple como lo es un beso, un abrazo, una caricia, una tarde con amigos, etc. Situaciones que creíamos tan insignificantes pero que en estos momentos daríamos cualquier cosa con tal de repetirlas. Nos enseñó que la tecnología podrá remplazar muchísimas cosas, pero jamás logrará suplir las expresiones tan puras de amor y cariño.

Sin duda esta pandemia dejará consecuencias económicas y sociales graves, sin embargo está en nosotros el decidir quedarnos con los aspectos positivos de las situaciones y que una vez que esto termine poder reunirnos todos y dar gracias a Dios por la bendición de un abrazo”: Maren Trujillo Corral.

EXPERIENCIA  GANADA

¿Qué he aprendido?

Durante este tiempo he tenido mucha comunicación con mis hermanas,… he conocido un poco más de ellas y lo que ellas piensan sobre mí, no solemos platicar más de unos minutos ya que cada quien está con lo suyo (escuelas, tareas, amigos, pensamientos, etc.), ahora es la excepción, pasamos más tiempo juntas recordando momentos de la infancia o algún otro momento que nos haya dejado un buen recuerdo en cualquier etapa de nuestra vida.

He aprendido que no estamos listo para sobrellevar este tipo de situaciones y me pongo a pensar “¿qué haríamos con algo más grave que esto?”, no trato de minimizar esta problemática, sino trato de pensar que si esto se ha salido de control ¿qué pasaría con otro tipo de cosas?, por ejemplo, con el desabasto de las aguas por el cambio climático, viendo la situación que se vivió de pánico en los supermercados por el COVID-19, que mucha gente arrasó con todo, inclusive circularon videos de gente peleándose por productos, ¿qué pasará cuando el agua se agote?, todo se descontrolará, más de lo que se está viviendo ahora, tengamos en cuenta que si no hay agua no hay nada, el agua le da vida a todo y es increíble saber que hay muchas personas que no la cuidan como debe de ser y que aun viendo las consecuencias que puede llevar esto, no hay un consumo o utilización racional de esta fuente de vida.

Todo lo que ha estado pasando es de reflexionarse y empezar a cambiar nuestra forma de ser, es triste ver que la mayoría de la persona le importa más hacerse el bien propio que a los demás, aclaro que en algunas ocasiones es bueno pensar solamente en uno mismo, no es justo también dejarse de cualquier cosa solamente por hacer sentir bien a los demás, sino, me refiero a que debemos hacer el bien a otras personas, ayudarlas y si no se puede hacer directamente, hacerlo de tal manera: hay tres carteras de huevo en un supermercado, solamente me llevaré una (lo necesario para mi), porque yo sé que llegará alguien que también estará buscando huevo para comprar y puede llegar la casualidad de que esa persona sea madre de familia numerosa o de bajos recursos y le irá de lujo con esas dos carteras de huevo o con una cartera de huevo.

De esa manera se puede a ayudar a mucha gente, pero lamentablemente no todos son así, hundimos a los demás incluso sin verlo o pensarlo, por eso es bueno razonar antes de actuar, no hacer las cosas por impulso.

¿Qué me preocupa?

Más que nada perder a un integrante de mi familia y sé que a nadie le gustaría eso, es más que obvio.

Me preocupa que después de que pase esta situación todo vuelva a como era antes, que nos dejen de importar aquellos cielos hermosos libres de smog, aquellos animales que se vieron libres por las calles de algunas ciudades, aquellas calles libres de basura, que nos deje de importar la unión con la familia, simplemente que nos deje de importar un poco de lo bueno que se vio y se vivió durante la cuarentena, todos volveremos a nuestras rutinas y dejaremos de hacer ese bien dentro de nuestros hogares y fuera de ellos, no volveremos a darle otro respiro al mundo, a menos de que vuelva a pasar algo parecido.

Me preocupa que este suceso no haya sido motivo para hacer reflexionar a la gente, que no lo hayan empleado de buena manera en sus casas o en cualquier contexto en el que se encontraban. Me preocupa que esto no genere una unión entre la población, que entendamos que a pesar de todas las etiquetas que existen en este mundo eso no nos hace ser diferentes, porque todos somos vulnerables ante este tipo de situaciones y eso nos vuelve comunes, nos hace necesitar de unos y ellos de otros.

¿Cómo veo que vendrá el futuro?

Siento que esto se pondrá más difícil, no mucha gente acata las instrucciones, volvemos a lo anterior dicho, nos creemos inmunes a este tipo de situaciones, vemos la gravedad de esto, pero no creemos en ella. Pienso que a partir de esto vendrán situaciones más difíciles, situaciones no solamente naturales, sino económicas, políticas y ni se diga sociales (las cuales han empeorado de hace mucho tiempo atrás, de igual modo las económicas y políticas). Creo necesario irnos preparando para lo que viene, tener la mente más abierta, crítica y ser racional ante este tipo de situaciones y sobre todo a mantener una unión comunitaria”: Mónica Marlenne Máynez Alcalá.

COROLARIO

Templanza: Esta virtud tan ponderada en otros momentos de construcción de lo humano, es hoy vital, así lo planteaba ya en 2003 en un trabajo presentado en el Foro en Defensa dela Humanidad, hoy reitero aquí es hora de templanza ADELANTE (http://www.lafogata.org/defensa/def_identidad.htm).