Chihuahua, Chih.
Analizado ya sin la premura del momento y con la calma que permite la lectura del mismo, el balance presentado por el gobernador Corral, tanto en Chihuahua como en Juárez en materia de seguridad, por mucho, en estos momentos, el asunto que más preocupa a los chihuahuenses (y no sólo, también a los inversionistas y los gobiernos de los aliados comerciales más importantes de México y Chihuahua, Canadá y EU), el de la seguridad, estremece por sus serias deficiencias.
Al abordarlo, justo en uno de los momentos en que la incidencia homicida está más alta, Javier Corral inició con un reconocimiento “al fiscal, el Mtro. César Augusto Peniche y el Dr. Óscar Aparicio Avendaño, comisionado estatal de Seguridad, han hecho una honrosa labor. Aunque a veces los medios no lo quieran reconocer”.
En una frase condensó dos de sus problemas: El de la creciente inseguridad -que no acepta pues los subordinados encargados de ella son reconocidos por él- y el del trabajo de los medios, rubro en el que apareció, o como un desconocedor de la labor periodística, o como el típico gobernante al que le molestan, no el trabajo de los medios, sino el hecho de que éstos reporten las acontecimientos.
El problema es que la ola homicida se desató nuevamente y se ha asentado prácticamente en los mismos niveles de principios del 2016, con saltos por demás espeluznantes.
Quizá la peor descalificación al trabajo realizado por Peniche y Aparicio sean las imágenes de los enfrentamientos suscitados en el tramo de la carretera Cuauhtémoc-Rubio, justo cuando los elogiaban.
Después de enumerar las acciones destinadas a “dignificar” la labor de los policías, hizo un recuento de las acciones efectuadas en la procuración de justicia: “… la Fiscalía logró resolver 32 mil 275 carpetas de investigación. Casi 7 mil de ellas se llevaron a juicio, y a la fecha se han emitido mil 394 sentencias. A través de la Agencia Estatal de Investigación, se concluyeron 59 mil 867 oficios de investigación y 85 mil 733 entrevistas, que llevaron a importantes arrestos y el esclarecimiento de diversos delitos relacionados con la delincuencia organizada…”.
En suma, todo bien.
Sin embargo, el mejor balance en esta materia quizá lo haya hecho uno de los mejores especialistas en el tema, Edgardo Buscaglia, experto de la Organización de las Naciones Unidas (ONU) entre 2001-2003 en Austria, jefe de asesores de la ONU en 2010 y 2011 en Afganistán, además de asesor externo de la ONU para el Entrenamiento e Investigación; también jefe de la Misión, en Afganistán y Pakistán, a cargo del programa de entrenamiento de los jueces y fiscales afganos especializados en delincuencia organizada y terrorismo.
Bien. Buscaglia realizó un lapidario balance del primer año de Javier Corral al frente del gobierno de Chihuahua: “Corral… no propuso ni adoptó ninguna limpieza patrimonial del sistema judicial al estilo Colombia o Italia, no adoptó ningún tipo de ley de redes de auditorías ciudadanas al estilo Brasil, USA, Canadá o Italia, no propuso y menos aún actuó para establecer auditorías independientes del dinero electoral mafioso que hoy es la principal raíz de la violencia organizada extrema en México”. (Nota de Itzel Ramírez, El Diario/Juárez, 6/X/17).
“Corral pertenece a esta fauna que mucho habla, mucho reparte y ningún resultado objetivo muestra”. (Ibídem).
Como lo ha sostenido reiteradamente, Buscaglia aseveró que Corral no realizó, o inició el combate al crimen organizado pues no hay, afirmó, una “reducción objetiva de la delincuencia organizada de Chihuahua en sus 23 vertientes, como la disminución de la explotación laboral y de la esclavitud sexual/laboral de mujeres y niñas en Chihuahua, o la reducción significativa de la pobreza”. (Ídem).
Buscaglia, además, criticó la pretensión del gobernador Corral de crear una red de medios públicos (estaciones de radio y televisión, además del semanario Cambio 16), “al considerar que tal acción servirá para crear un aparato de propaganda que le sirva para promover su imagen de cara a la búsqueda de otros cargos políticos…. A este sistema obedece el aparato propagandístico de concesiones de medios, que sin saberlo o a sabiendas, terminará fomentando más crimen organizado en la política de Chihuahua y de México”. (Ibídem).
Quien lo dijo es, probablemente, el especialista más prestigiado en el análisis del crimen organizado.
[email protected]; Blog: luisjaviervalero.blogspot.com; Twitter: /LJValeroF